Esta semana en nuestras clases extraescolares de robótica hemos terminado nuestro primer proyecto con Raspberry Pi, el juego Simón.
Divididos en dos equipos, cada uno realizó el montaje de todo el juego y cuando ya lo tenían todo montado empezamos con el código en Scratch.
Los chicos enseguida se dieron cuenta de lo sencillo que es programar una Raspberry Pi con Scratch ya que tan sólo tienen que encajar las fichas indicando al juego lo que quieren conseguir, en este caso lo que queríamos conseguir es que de forma aleatoria se encendieran cuatro leds y después nosotros ser capaces de realizar la misma sucesión de colores presionando los cuatro pulsadores que habíamos montado con anterioridad.
Los dos equipos terminaron el proyecto, a un equipo les dió tiempo a realizar un segundo nivel más complicado incluyendo nuevos personajes y fondos.
La semana que viene realizaran su último proyecto con Raspberry Pi, un emulador de aviones donde tendrán que acertar a objetos que se irán moviendo por la pantalla, tan sólo utilizando el protoboard como mando, para así realizar una especie de videoconsola con tan solo una pantalla, Scratch y una Raspberry Pi.
Yo me despedí de mis alumnos muy tristemente ya que por motivos medicos no podré impartir las tres últimas clases pero les dejo en muy buenas manos con un compañero que les ayudará a crear su segundo proyecto con Raspberry Pi.
Hasta Pronto!!
Olvido Medina. Profesora de clases extraescolares de robótica.